domingo, 15 de noviembre de 2009

Imperdible documento higiénico.

Ustedes saben cómo es la inspiración, las musas no respetan ámbitos ni conocen la privacidad. El tema es que a Roberto se le aparecieron mientras estaba en el ñoba y ahí nomás pegó un grito salvaje, desesperado, y le pidió una Bic* al Turco Matelli, que presto se arrimó al inodoro con los ojos cerrados para alcanzársela. Hoy este humilde blog está orgulloso de poder mostrarles la obra que resultó de dicha anécdota. Gracias, Achura. Gracias, Turco Matelli por alcanzarle la birome.


*Ernestina Vega reveló en su ensayo sobre Roberto Achura, llamado "Un aplauso para el escritor", que una de la mañas del poeta era utilizar siempre una Bic negra.



1 comentario:

nina ines dijo...

gracias blogger por prestar espacio a las cosas que realmente importan en la vida.
el blog esta re bueno y saludos a todos los que me conocen.